William Hill, en su
versión española, nos ha dado constantes motivos durante este año de actividad
para que nos podamos reír con su infinita torpeza.
Cada vez se parece más al
humorista inglés Benny Hill, con el que comparte “apellido”, aunque con una
sustancial diferencia entre ambos, y es que Benny sí pretendía hacer reír, y
William lo consigue muy a su pesar.
No nos pararemos a
analizar su lamentable Servicio de (des)Atención al Cliente, para no hacer
eterno este artículo, y vamos a centrarnos en el servicio de apuestas propiamente dicho.
Veamos la última pifia
que ha cometido, de momento, porque con William Hill siempre hay que esperar el
“más difícil todavía”. (Luego, al final, os dejo un par de detalles más).
Como soy cliente “non
grato”, yo no puedo apostar directamente, como vosotros, sino que mis
movimientos están permanente vigilados, y han de ser autorizados de forma
individual, por personal (supuestamente) especializado, antes de que se
formalicen.
Este aberrante trato, con
el que William Hill me “obsequia” desde hace casi un año, no obedece a que yo
haya cometido irregularidad alguna, sino que es el que reciben quienes ganan algo
de dinero en esta casa, o eso he podido deducir yo, ya que William Hill se
niega a dar ninguna explicación al respecto e incluso intenta negar que exista tal
situación.
Durante este mes de junio
se han celebrado partidos de la World League de Voleibol. Se trata de un evento
de máximo nivel del que existe información precisa y que puede seguirse en la
página web oficial de la propia Federación Internacional de Voleibol. Aquí os
dejo la captura, donde se ve que a las 22:00 del 1 de junio (hora española), se
disputaba el partido entre Canadá y Holanda. En los días posteriores no se
celebraba ningún otro partido que pudiese confundirse con éste.
En William Hill anunciaban
este partido para la 1:00 del día 3 de junio (hora española), y permitían
apostar con normalidad en este evento. Estuve esperando un buen rato, perplejo,
viendo como el partido seguía disponible para apuestas pre-partido, cuando ya
estaba próximo a su finalización.
Y para divertirme, decidí
intentar apostar para confirmar el ridículo de William Hill. Pude apostar en
diversos mercados (¡cuyo resultado ya era definitivo!), margen de victoria del
primer set, total de puntos,…, e incluso resultado exacto final (¡tras haber
finalizado el partido!). Estas apuestas las realicé a lo largo de los días 1 y
2 de junio, y así se registraron en mi historial.
Aprovecharé una de estas
apuestas para mostraros el denigrante trato al que somete William Hill a
algunos clientes como yo. Veamos el detalle del vergonzoso proceso de realización de una
de estas apuestas:
- Intento apostar 12 euros (como se ve en la 2ª captura, en el cupón que aparece a la derecha)
- Me aparece una pantalla
donde se me informa de que mi apuesta está siendo referida (a un experto
supongo) antes de ser aprobada. Espero un buen rato con esa información en mi
pantalla.
- Tras la espera, y la
revisión de mi apuesta, me aparece un mensaje ofreciéndome la posibilidad de
apostar 6 euros, dándome un plazo de unos dos minutos para aceptar la oferta.
Me hacen una oferta personalizada, como se puede leer en esta captura, "Desafortunadamente no podemos aceptar su apuesta solicitada, pero si podemos ofrecer la siguiente". (La cifra que me permiten apostar varía en función de la apuesta; en este caso
han sido “generosos”, ya que a veces solo me permiten apostar unos céntimos).
Tras aceptar, obtengo el
correspondiente recibo, y la apuesta se inscribe correctamente en mi historial
(como se ve en la 3ª captura).
¿Cómo es posible que
incluso estando bajo vigilancia permanente pueda realizar este tipo de
apuestas? ¿Quién me estaba vigilando en ese momento? ¿Bob Esponja? Es que ni
estando monitorizado y observado permanentemente consiguen nada.
Y es que yo no soy el problema, el
problema es la pésima calidad del servicio que ofreces Guillermito. Si dejases
de obsesionarte conmigo, y te dedicases a hacer bien tu trabajo, nos iría mucho
mejor todos.
La gravedad de este hecho
no solo radica en el trato que reciben algunos clientes o en una equivocación
puntual, sino en que el error se produce en una oferta personalizada que me han
hecho TRAS HABER ESTUDIADO MI APUESTA.
Que se hayan equivocado puede
ser más o menos grave, pero que tras haber estudiado, como mínimo, en 4
ocasiones el partido, persista el error es inaudito e injustificable.
Pero no pasa nada, porque
luego, como siempre, lo anulan sin más. Es lo bueno que tiene ser irresponsable
(en el sentido más amplio de la palabra).
En este caso SÍ que procede la anulación, puesto que hay un error OBJETIVO, y no he reclamado, obviamente, ya que solo pretendía dejar en evidencia a esta casita de apuestas.
En este caso SÍ que procede la anulación, puesto que hay un error OBJETIVO, y no he reclamado, obviamente, ya que solo pretendía dejar en evidencia a esta casita de apuestas.
Para que veáis que no se
trata de un hecho aislado, aquí os pongo algunos ejemplos más.
EJEMPLO 1:
William Hill siempre
busca nuevas formas de ganar dinero, y hace unos meses probaron una fórmula
revolucionaria: pagar 1,01 por todas las opciones a favor, en contra, over,
under, hándicap,…, todo a 1,01.
¡Qué grande la nueva política de fijación de cuotas de
WH! ¡Todo a 1,01! ¡Vamos que me lo quitan de las manos! ¡Apuestas de marca a
precios de mercadillo! ¡Vamos que nos vamos! ¡Venga señora, llévele un over para
su marido que seguro que es de su talla!
Esto puede dar pie a una curiosa reflexión. En Gibraltar existe un número desproporcionado
de sociedades en relación con el número de habitantes, por lo que no es nada
fácil encontrar personal cualificado, e incluso resulta difícil encontrar
simplemente personal. Si a esto añadimos que este sistema de fijación de cuotas
no parece exigir precisamente un descomunal intelecto, y que hay monos en abundancia en el Peñón,
¿existirían indicios suficientes para que alguna asociación protectora de
animales investigase la posible existencia de explotación animal? (es pregunta, no afirmación).
Pero el todo a 1,01 parece no ser suficiente para estos llanitos, ya que, aunque sea casi imposible, existe la posibilidad de que alguien gane, una cantidad irrisoria, pero una cantidad al fin y al cabo.
Y no hay nada que odie más William Hill que un apostante
ganador (como habéis visto antes), así que trataron de idear un
sistema para erradicar esta molesta clase de clientes.
Esto les llevo a probar
otra técnica, que esta vez sí que habría sido infalible de haberse
generalizado.
Como veis (en Total Sets), se trata de poner
“más de” y “menos de”, pero sin indicar la cantidad, ni en la exposición de
cuotas, ni en el cupón que se crea arriba a la derecha.
Supongo que luego, en
función del resultado, ya William Hill elegiría el número más conveniente. Así
se asegurarían beneficios sí o sí.
EJEMPLO 3:
Y para acabar, un ejemplo
más preocupante si cabe, ya que estos gibraltareños no saben distinguir a un
hombre de una mujer.
Nosotros los españoles no
tenemos ese problema, ya que nuestro refranero nos da pistas de cómo distinguirlos
fácilmente. “Si tiene barba San Antón, y si no la Purísima Concepción”
Esto lo digo porque en la
última Champions League de voleibol se podía apostar a que un equipo femenino
ganaba el torneo masculino. Aquí tenéis la prueba.
Estos de William Hill son
increíbles, ¿qué se tomarán antes de ir a trabajar?
Yo me los imagino como a
los míticos Faemino y Cansado en sus disparatados diálogos:
-F: Pues yo creo que este
año la Champions masculina la ganan los italianos
-C: Pues yo creo que la
van a ganar las mujeres.
-F: ¿¡Pero cómo dices
eso!?
-C: Ya sé que no es fácil.
La Federación tiene que cambiar en tiempo record sus estatutos, y cambiar la
composición de la Champions, y luego un equipo femenino tiene que ganar a los
mejores equipos masculinos del continente. No es fácil, pero puede pasar. A lo
mejor pierdo la apuesta, igual sí, pero nunca se sabe.
Una última pregunta, ¿cuánto cuesta la botella de whisky en Gibraltar? No lo sé, pero, por lo visto, es demasiado barata.
Venga, me voy a ver si
puedo apostar en William Hill a que Federer gana el Open Británico de Golf en
la modalidad de contrarreloj por equipos y marcando 3 goles antes del descanso.
Un saludo, ...y cuidado con William Hill.
ja,ja,ja.....impresionate Rosberg. Un saludo y gracias por estos articulos que sacan al descubierto los entresijos de algunas (la mayoria) casas de apuestas.Saludos
ResponderEliminarEs que lo de William Hill es lamentable,…, y fíjate que todo lo que he puesto es solo de voleibol; si ponemos todos los deportes, da para un libro.
EliminarSaludos, y muchas gracias por el comentario.
Es que la supuesta oferta personalizada no lo es tal, hay un limite al partir del cual te refieren al "experto", segun mi experiencia nunca te dan un centimo mas del limite, de hecho no creo q haya nadie que apruebe las apuestas jaja
ResponderEliminarYa sé que no hay expertos en nada en William Hill, pero quería reflejar como trata a los jugadores esta casa.
EliminarY lo más lamentable, es que aún estando bajo control, no pueden evitar este tipo de apuestas.
Eres un crack!!!!
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